Bajo la palabra “Ley”,
mucho se ha escrito, dicho y hecho a lo largo de la Historia de la Humanidad,
aunque esta palabra y su interpretación no siempre ha sido lo más justa
posible. Leyes Divinas y Sagradas que dictaminaban sobre el castigo e incluso
asesinato de personas por sus creencias o ausencia de ellas, por su libre
pensamiento, por no seguir las doctrinas religiosas que se imponían, Leyes sobre
discapacitados y lisiados, los cuales eran abandonados, en algunos casos
considerados como seres demoníacos, poseídos o inservibles, y en otras
ocasiones se les suponía que los defectos físicos eran marcas del pecado. A lo
largo de nuestra historia siempre aparece la obscura sombra de la religión,
siempre actuando en nombre de algún dios. Y todavía sigue así.